Un empleado en una institución pública era famoso por su rectitud y puntualidad, además por haber contribuido al buen rendimiento de su oficina.
Una mañana, la primera de su vida de empleado, llegó con retraso y el jefe le llamó la atención vivazmente.
Entonces el empleado pensó " este fulano le da mayor importancia al ruido del árbol que cae y no advierte el rumor del bosque que crece"